Vivir es adaptarse a la vida.
Es la actitud que tienen (o no) las personas al afrontar aquello que les preocupa. Unas preocupaciones que, fruto de los caprichos y vicisitudes de las sociedades más desarrolladas, se han ido sofisticando hasta el punto de llegar a obviar el significado de la vida misma.
Es la actitud que tienen (o no) las personas al afrontar aquello que les preocupa. Unas preocupaciones que, fruto de los caprichos y vicisitudes de las sociedades más desarrolladas, se han ido sofisticando hasta el punto de llegar a obviar el significado de la vida misma.
De manera cíclica, el ser humano se ha tenido que enfrentar a una serie de escenarios hostiles que han dificultado su desarrollo. Episodios que han comprometido su existencia y que, consecuentemente, han causado cambios substanciales en los individuos.
A la capacidad de adaptarse es al que los expertos se han referido como inteligencia. Carl Gustav Jung, psicólogo suizo, decía que “lo que niegas te somete, lo que aceptas te transforma”.
Esta pandemia mundial, no obstante, ha conllevado una realidad desconocida que, por sus dimensiones e incertidumbre, ha impedido en muchos casos la transformación necesaria para hacerle frente.
Ante este tipo de situaciones, es importante relativizar las consecuencias y centrarse en aquello que depende de uno mismo.
Si lo extrapolamos al plano laboral, el escenario nos brinda la oportunidad de reinventarnos, de adquirir nuevas aptitudes y competencias y de centrarnos en nuestro crecimiento personal. Consultores expertos te ayudarán y te orientarán en este proceso.
Aprovechar esta oportunidad o dejarse llevar por la vorágine de emociones depende de cada uno.
A la capacidad de adaptarse es al que los expertos se han referido como inteligencia. Carl Gustav Jung, psicólogo suizo, decía que “lo que niegas te somete, lo que aceptas te transforma”.
Esta pandemia mundial, no obstante, ha conllevado una realidad desconocida que, por sus dimensiones e incertidumbre, ha impedido en muchos casos la transformación necesaria para hacerle frente.
Ante este tipo de situaciones, es importante relativizar las consecuencias y centrarse en aquello que depende de uno mismo.
Si lo extrapolamos al plano laboral, el escenario nos brinda la oportunidad de reinventarnos, de adquirir nuevas aptitudes y competencias y de centrarnos en nuestro crecimiento personal. Consultores expertos te ayudarán y te orientarán en este proceso.
Aprovechar esta oportunidad o dejarse llevar por la vorágine de emociones depende de cada uno.